El par euro-dólar finalmente quebró bajo su mínimo de octubre de 2019 y se encuentra operando en su nivel más bajo en casi tres años, dado que el billete verde continúa beneficiándose de la aversión al riesgo impulsada principalmente por las preocupaciones sobre el brote de coronavirus y sus posibles efectos negativos en la economía mundial.
El euro aceleró su movimiento descendente el miércoles tras la publicación de decepcionantes cifras de producción industrial para la región. En diciembre del 2019, la producción se contrajo en 2,1% acumulando 4,1% para el año, cifras mucho peor de lo esperado y que dan cuenta del sombrío panorama para el sector industrial.
Por su parte, Estados Unidos ha publicado las cifras de inflación al consumidor que resultaron ligeramente mejores a lo esperado registrando incrementos en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del orden del 0,1% para enero y 2,5% en base interanual. El índice subyacente, que excluye componentes más volátiles como alimento y energía, creció 0,2% en enero y 2,3% en los últimos 12 meses. Las cifras de inflación son un factor más impulsando al billete verde.
El par EUR/USD se mantiene en el área de 1.0860, habiendo marcado su nivel más bajo desde abril de 2017 en 1.0853 más temprano. El panorama continúa siendo bajista de acuerdo con los indicadores técnicos, aunque el RSI ya ha alcanzado condiciones de sobreventa, lo que podría dar un respiro a la moneda hegemónica antes de nuevos mínimos.
En el gráfico semanal, el EUR/USD tiene margen para seguir cayendo, con 1.0840 como soporte inmediato, seguido por 1.0820, mínimo 23 de abril del 2017. Si logra quebrar bajo este nivel, no se observan barreras significativas hasta 1.0569, mínimo mensual de abril del 2017.
Por otro lado, la media de 20 días en 1.1000 puede considerarse una resistencia importante en el corto plazo, reforzada por el nivel psicológico. Otras barreras al alza se observan en 1.1040, línea de tendencia proveniente desde los máximos de diciembre y luego la media de 100 días en 1.1060.
El euro aceleró su movimiento descendente el miércoles tras la publicación de decepcionantes cifras de producción industrial para la región. En diciembre del 2019, la producción se contrajo en 2,1% acumulando 4,1% para el año, cifras mucho peor de lo esperado y que dan cuenta del sombrío panorama para el sector industrial.
Por su parte, Estados Unidos ha publicado las cifras de inflación al consumidor que resultaron ligeramente mejores a lo esperado registrando incrementos en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del orden del 0,1% para enero y 2,5% en base interanual. El índice subyacente, que excluye componentes más volátiles como alimento y energía, creció 0,2% en enero y 2,3% en los últimos 12 meses. Las cifras de inflación son un factor más impulsando al billete verde.
El par EUR/USD se mantiene en el área de 1.0860, habiendo marcado su nivel más bajo desde abril de 2017 en 1.0853 más temprano. El panorama continúa siendo bajista de acuerdo con los indicadores técnicos, aunque el RSI ya ha alcanzado condiciones de sobreventa, lo que podría dar un respiro a la moneda hegemónica antes de nuevos mínimos.
En el gráfico semanal, el EUR/USD tiene margen para seguir cayendo, con 1.0840 como soporte inmediato, seguido por 1.0820, mínimo 23 de abril del 2017. Si logra quebrar bajo este nivel, no se observan barreras significativas hasta 1.0569, mínimo mensual de abril del 2017.
Por otro lado, la media de 20 días en 1.1000 puede considerarse una resistencia importante en el corto plazo, reforzada por el nivel psicológico. Otras barreras al alza se observan en 1.1040, línea de tendencia proveniente desde los máximos de diciembre y luego la media de 100 días en 1.1060.
